miércoles, 21 de noviembre de 2012

Como Controlar El Esfínteres .




El control de esfínteres no se aprende. Se adquiere cuando el niño está maduro para ello. Caminar, hablar, comer, son funciones que se adquieren, cuando los niños están lo suficientemente maduros. Son adquisiciones paulatinas, lentas, que llevan mucho tiempo.
Aunque la estimulación puede influir en algunos niños, lo cierto es que todos intentarán caminar alrededor del año, comer alrededor de los 6 meses, y controlar esfínteres entre los 2 1/2 y 3 años. No hay ningún apuro, puesto que la edad para comenzar a hacer todas estas cosas, no tiene relación alguna con el desempeño posterior en la vida adulta, y a nadie le van a preguntar en la universidad, a qué edad aprendió a caminar. Los adultos deberíamos preguntarnos qué nos pasa que estamos tan apurados por conseguir logros en nuestros hijos.
Al haber fijado como "normal" la edad de 2 años para el control de esfínteres, nos hemos creado un problema y sobre todo, se lo hemos creado a nuestros hijos.
Bien entrada la segunda mitad del segundo año de vida (o sea, después del año y medio), algunos bebés pueden empezar a darse cuenta cuando tienen sucio el pañal, e incluso a saber cuando "se lo están haciendo". Este es un lento proceso que puede llevar alrededor de 2 años más, desembocando en el control de esfínteres.
Es frecuente escuchar a las mamás excusando a sus hijos que se lo hicieron encima, diciendo "estaba tan entretenido jugando, que se olvidó", o preguntando millones de veces antes de salir de cada lugar, si quieren hacer pis, o limitando la ingesta de líquidos a la noche para que aguante sin mojar la cama. Cuando el control de esfínteres está adquirido, estas escenas son infrecuentes. A los adultos y a los niños mayores no nos ocurren estas cosas.

Esperar a que llegue el verano

Aprovechar el verano para quitar los pañales es una conveniencia de los adultos. Así aprovechamos con el niño de un año y medio, con el de 2, con el de 2 y medio indistintamente. Perseguimos entonces a los niños incansablemente preguntándoles si tienen ganas de hacer pis, les tocamos las ropas, los sentamos en el inodoro sin ganas, e invertimos preciosas horas en comunicarnos en este nueva escala de valores donde lo más importante, lo que pone feliz o triste a mamá, es "si me lo hice o no me lo hice". Quizás el mito del verano nos haya sido heredado de la época de los pañales de tela, pero hoy en día, con los desechables, con lavadoras automáticas, no hay motivo alguno para apurar los procesos evolutivos de nuestros hijos. Algunos podrán controlar temporalmente esfínteres, cuando todos estamos de vacaciones, y tienen a mamá todo el día consigo, pero al comenzar las clases, las exigencias, las separaciones, vuelven a "retroceder", dejando en claro que aún no pueden ocuparse de controlar esfínteres en situaciones donde están frágiles emocionalmente.
¿CÓMO HABLAR CON LOS NIÑOS?



La necesidad emocional del niño Colérico es controlar y sus necesidades emocionales es que aprecien sus logros, oportunidad para liderar y tener parte en las decisiones familiares.
Este niño tiene necesidades que deben ser cubiertas para que su comportamiento no te canse y puedas vivir en paz.
Con el niño Colérico hay que aprender a negociar. Si tú le hablas imponiéndote y no dando explicaciones, tendrás un dictador en potencia. Este niño cree tener la razón y su deseo principal es controlar. Querrá controlarte a ti y a todo el mundo y si no lo dejan, y él no sacia esta necesidad inconsciente, su comportamiento será muy rebelde.
Por supuesto no puedes dejar que controle todo lo que se le antoje y menos a ti, pero el secreto está en darle cosas en el hogar para que controle. Por ejemplo el perro, o el encargado de hacer cosas determinadas en el hogar: Poner la mesa, sacar la basura, etc. A él le encanta trabajar y debes mantenerlo ocupado.
Aunque no le interesa mucho la opinión de los demás, sí le gusta que aprecien sus logros o lo que hace por otros. Palabras como muy buen trabajo, te felicito, eres un campeón, yo sabía que lo lograrías, etc, satisfacen su necesidad de aprecio.
Tomar partes de las decisiones en la familia es muy importante, porque estarás dándole oportunidad de que dé su opinión, que para él vale mucho, y en cierta forma estará liderando. Cuando compren comida afuera pregúntale que le gustaría. Cuando vallan a algún lado, pregúntale a donde quiere ir. Cuando lo vallas a vestir pregúntale que se quiere poner, dentro de dos o tres opciones que tú le des. Y todo lo que se te ocurra que él pueda opinar, eso le hará mucho bien porque se sentirá parte importante en el hogar.
Nunca le digas NO porque NO, explícale las razones, pero nunca te dejes dominar debes demostrar quien es la autoridad siempre, si aflojas buscará la forma de dominarte.
Háblale negociando cuando no quiera hacer algo y haciendo preguntas. Por ejemplo no se quiere vestir y corre por todos lados, negocia con él, el darle ordenes no funcionará con un colérico. Dile: “Uy yo que te quería llevar al parque, o comprarte un caramelo, o ir a lo de fulano, me parece que si no te vistes, no lo vamos a poder hacer”. ¿Tú quieres hacer eso?. “SI”, va a contestar. Dile “bueno entonces rápido vamos a vestirnos y haremos lo que quieres” (Pensará que es su idea)
Si no logras negociar con él al principio, no te sientas mal, sigue insistiendo, quizás usando cosas que le gustan a él. Al principio quizás no entienda y no quiera dar el brazo a torcer porque vas a cambiar de dar ordenes, a una actitud que él no conoce, y no te tenga confianza, pero con el tiempo empezará a negociar y así lo manejarás mucho mejor.
Con el niño Colérico tienes que tener mucha habilidad para negociar todo el tiempo, nunca dar ordenes sin explicación, sino negocia siempre y explica siempre.
Usa palabras como: trabajo, ayuda, rápido, líder, jefe, campeón, número 1, el mejor, tu opinión, tu decides… Palabras que se relacionan con su personalidad y necesidad emocional
Así que si tienes un niño Colérico, recuerda esto cada vez que tengas que hablar con él y pon manos a la obra, para así de esa forma mejorar en su educación y controlar esta pequeña fiera.
LA COMUNIDAD EDUCATIVA


Qué es la Comunidad Educativa?
Conjunto de personas libremente asociadas.
Surge de la voluntad de unión de las personas que se entrelazan entre sí, fundiéndose en un organismo de interrelaciones sin perder la propia entidad e individualidad.
¿Qué define a una Comunidad Educativa?
El pluralismo de matices enriquece el pensamiento común y es fuente de interrogantes para que la comunidad esté siempre en actitud de escucha y búsqueda.
Conjunto de personas cuya esencia radica en la unión de personas comprometidas en la realización de un proyecto educativo.
 
 
Hoy en día la Comunidad educativa es una realidad donde se dan cita multiplicidad de elementos.
Familias.
Alumnos.
Profesores.
Administración.
Sociedad en su conjunto.

Que todos los componentes de la comunidad educativa colaboren para conseguir el primer objetivo que establece la ley: Proporcionar una educación de calidad a todos los ciudadanos de ambos sexos en todos los niveles del sistema educativo”
 
FAMILIA Y COMUNIDAD
 
Primer entorno educativo.
Limitaciones en su función educativa, acuden a otras instituciones para ampliar la experiencia de formación para el desarrollo de los niños.
Fuente de información sobre los niños y niñas.
Los cambios profundos y vertiginosos que vive nuestra sociedad en su conjunto repercuten sobre la familia y su función.
PRINCIPALES FUNCIONES DEL EDUCADOR EN LA COMUNIDAD EDUCATIVA
 
 
Conocer al alumnado y establecer el diagnóstico de sus necesidades.
Motivar al alumnado.
Proporcionar información.
Velar por un aprendizaje significativo.
Enseñarles a aprender de manera autónoma.
Proponer actividades de aprendizaje y orientar su realización.
Fomentar la participación de los estudiantes.
Asesorar sobre la oportunidad del uso de los medios.
Ofrecer tutoría y orientación a los padres y apoderados.
 
 
ESTRATEGIAS PARA LA PARTICIPACIÓN DE LA FAMILIA
 
 
Desarrollar actividades sobre la participación democrática.
Fomentar la participación en todo tipo de actividades.
Hacer al alumnado consciente de su propio proceso de aprendizaje.
Aprovechar las diferentes actividades que organice el centro.
Desarrollar talleres donde se trabajen los temas transversales.
 
CONCLUSIONES
 
Para poder educar se necesita de una aportación coordinada de todos los integrantes del centro educativo.
Confluencia y coordinación de todos los integrantes en el proceso educativo.
Participación constante y responsable.
Construir la comunidad como ideal de educación: cordialidad, apertura, respeto profundo, naturalidad en el trato, superación de las diferencias.
 
 

El Buen Trato

¿Qué es el BUEN TRATO?
 
   A todos nos gusta que se nos trate bien: que nos atiendan, respeten y escuchen.
   Nada realza o daña más la imagen de una persona que la manera en que es tratadpor los demás.
Todo niño da lo que ha recibido de su familia, y todos los seres humanos en general somos el fruto de lo que hemos recibido…
   Por ello el “buen trato” es un valor de vital importancia en la familia, si en la familia no aprendemos buenos modales, urbanidad, cortesía, es difícil que podamos vivirlos plenamente.
 
 
§Una persona que se esfuerza en vivir la cortesía tiene como lema:
“NO HAGAS A LOS DEMÁS, LO QUE NO TE GUSTARÍA QUE TE HICIERAN A TI”
 
 
Algunas ideas que no debemos olvidar:
 
§En el mundo familiar, social o laboral, nadie tiene derecho a hacer a otros víctimas de su estado de ánimo.
 
§El buen trato es signo de buena educación, de equilibrio y madurez; pero  en esencia es un testimonio elocuente que es imitado por los menores.
§Para cosechar: hay que sembrar.
§Luego se recoge: lo sembrado.
§Si un padre trata con violencia, agresividad y groserías a sus hijos… ¿con qué autoridad moral podrá exigir respeto y obediencia?
 
Expresiones de
“buen trato”
§Brindar amor y protección a los hijos
§Devolver el cariño y cuidado hacia los padres cuando sean ellos que necesiten de cuidado
§Contestar amablemente el teléfono
§Dar la información a tiempo y acertada.
§Responder con amabilidad cualquier tipo de comunicación.
§Llegar a tiempo, no hacer esperar a los demás, menos a un niño
§No hablar mal de los demás.
Respetar la vida privada, propia y ajena.
Respetar el espacio de los demás
Aceptar a los demás como son.
Ayudar a los demás a descubrir  y valorar sus cualidades.
 
Compartamos en grupos
 
1. ¿Qué es para mí el buen trato?
2. ¿Qué significa, en nuestra familia, el buen trato?
3.¿Nuestras expresiones y actitudes para con los demás son demostraciones de Buen trato?
4.¿En nuestras relaciones familiares evitamos la grosería, la vulgaridad y los apodos? ¿Por qué?
5. ¿Qué actitudes se deben mejorar para generar un ambiente de buen trato y cortesía?